martes, 11 de junio de 2013

Mediatico (2002)

Una mirada graciosa sobre como veía la televisión abierta argentina en el año 2002 (Nota: este dibujo fue hecho con el programa Paintbrush del Windows 3.11 en una 486):


jueves, 6 de junio de 2013

El poder de la vigilancia como método de control social: Poder disciplinario de Foucault y el Panoptismo usado para la construcción de una sociedad disciplinaria

Por Federico Garzón Noguera (texto psicológico escrito en el 2006)


Introducción:

En este informe me propongo trabajar sobre el poder disciplinario que plantea Michel Foucault y al uso de uno de sus instrumentos: la vigilancia jerárquica. A lo largo del trabajo desarrollaré cómo se formó el poder disciplinario en la sociedad occidental entre los siglos XVII, XVIII y principios del siglo XIX. Utilizo como modelo el panóptico de Jeremy Bentham, propuesto por Foucault como ejemplo, para mostrar cómo un dispositivo simple genera un poder disciplinario que define cambios en la sociedad y a los individuos inmersos en ella, un poder que produce un saber sobre las personas encerradas en diversas instituciones sociales. Una figura que controla a las personas, que ejerce un poder que está en todas partes; no es un poder físico sino óptico, está oculto, pero que es efectivo para generar un control social.
Para ello utilizaré los textos de Michel Foucault: El poder psiquiátrico (clases 21 y 28 de noviembre de 1973) y vigilar y castigar (tercera parte: Los medios del buen encauzamiento y El panoptismo).y como bibliografía secundaria el capítulo 4 del texto Una introducción al construccionismo social de Vivien Burr: ¿Qué significa tener poder?

La construcción del poder disciplinario en la sociedad occidental.

Según lo expuesto por Michel Foucault en su texto El Poder Psiquiátrico, los dispositivos disciplinarios surgen entre los siglos XVII y XVIII, aunque ya se manifestaban en algunas instituciones como por ejemplo las comunidades religiosas de los Jesuitas que transferían sus disciplinas a los países colonizados,  comunidades que existían dentro de los dispositivos de soberanía durante la Edad Media hasta el siglo XVI. El esquema de soberanía era feudal y monárquico, había una relación asimétrica entre el Rey y las masas, entonces estas instituciones novedosas funcionaban como oposición a este modelo imperante.
A partir de los siglos XVII y XVIII con la formación de la burguesía hubo cambios importantes que se trasladaron a toda la sociedad occidental. Según Vivien Burr:
Hubo un desplazamiento desde un “poder soberano” en el cual el monarca controlaba al pueblo por el poder de castigar, forzar o matar, hacia el “poder disciplinario” en el cual las personas son disciplinadas y controladas al someterse ellos mismos libremente a la inspección de otros (especialmente los “expertos”) y a su propia inspección. Tal  poder disciplinario, (…), es una forma de control mucho más efectiva y eficiente.
En consecuencia, para Foucault, los dispositivos disciplinarios empiezan a tomar el control de la sociedad y, por lo tanto, con el correr de los tiempos se expanden hasta conformar una sociedad disciplinaria. Los cambios se producen en instituciones como los ámbitos educativos mediante la disciplinarización de la juventud por medio del ejercicio pedagógico; también los cambios se dan en la prisión (el modelo del panóptico de Bentham, como figura arquitectónica en el siglo XVIII, como veremos más adelante), el ejército (aplicación de la disciplina militar hacia la figura del soldado), la policía (el desarrollo de un registro prontuario), los ámbitos fabriles y hasta los grandes talleres empiezan a disciplinarse, producto del comienzo del capitalismo y el aumento de la población. Por consiguiente, empieza a hablarse de acumulación de hombres producto de la acumulación de capital (los obreros como fuerza de trabajo).
En definitiva, el poder disciplinario modifica las relaciones entre el cuerpo, el sujeto y el individuo; hay una captura total y permanente de los cuerpos. Como nos señala Foucault: “el poder disciplinario es individualizante porque ajusta la función sujeto a la singularidad somática por intermedio de un sistema de vigilancia y escritura (…)”. La escritura como registro de todo lo que ocurre y hace el individuo es fundamental como herramienta para el poder disciplinario ya que se aplica en todos los ámbitos de la sociedad.
Hasta aquí mostré cómo se fue construyendo el poder disciplinario a partir de los cambios en la sociedad occidental entre los siglos XVII y XVIII, resta aún presentar el modelo del panóptico creado y desarrollado por Jeremy Bentham desde la óptica de Michel Foucault para utilizarlo como modelo de dispositivo de vigilancia jerárquica, un modelo que dará como resultado individuos disciplinados.

La concepción de Foucault acerca del panóptico de Jeremy Bentham.

En el primer apartado formulamos que en la sociedad occidental, entre los siglos XVII y XVIII por el aumento de la población, hubo cambios en las prácticas institucionales, en la economía (el capitalismo) y en otras áreas, generando como consecuencia el surgimiento de un poder disciplinario en las prácticas sociales que permitieron el control de la sociedad y de sus miembros, poder que produce al individuo de la sociedad industrial occidental (como expliqué al comienzo).
Para hablar acerca de la vigilancia jerárquica como instrumento del poder disciplinario utilizaremos el panóptico de Bentham. Para Foucault en Vigilar y Castigar (1975), el panóptico, creado por Jeremy Bentham en 1787, es un modelo de prisión que se puede aplicar y utilizar para varias instituciones (escuelas, talleres, asilos, hospitales, fábricas, etc.). Se compone de la siguiente manera:
En la periferia, una construcción en forma de anillo; en el centro, una torre, ésta, con anchas ventanas que se abren en la cara interior del anillo. La construcción periférica está dividida en celdas, cada una de las cuales atraviesa toda la anchura de la construcción. Tienen dos ventanas, una que da al interior, correspondiente a las  ventanas de la torre, y la otra, que da al exterior, permite que la luz atraviese la celda
de una parte a otra.
En la estructura del anillo hay un pasillo donde se puede caminar de una celda a otra y en la torre central hay una habitación grande donde se puede observar todas las celdas de la institución con solo moverse por todo el espacio. Solamente se encierra una persona por celda, que puede ser un alumno, un preso, un obrero, un enfermo, un loco, etc. La persona se encuentra en su celda con un estado de vigilancia continua y no puede estar en contacto con el resto del grupo de personas, además el juego de luces que hay en las ventanas impiden ver quién está en la torre central, con lo cual, cada una de las personas que están en la celda empiezan de a poco a vigilar sus propios comportamientos. Lo que logra el modelo del panóptico es reforzar el poder tanto a la propia estructura como al supervisor o vigilante que observa y dirige desde la torre sin ser visto. Como dice Foucault: “Se trata de lograr que la fuerza del poder sea la más intensa, su distribución, la mejor, y su punto de aplicación, el más justo” (El poder psiquiátrico, curso 1973-1974, clase del 28 de noviembre de 1973)
Este poder disciplinario es un poder anónimo e invisible, un poder general visible sobre las personas en su centro, pero se dirige hacia cada individuo para disciplinarlos y lograr la individualización. Cada persona detenida en la celda está constantemente atenta a la posibilidad de ser vigilado, lo tiene incorporado. Esto es uno de los logros del panóptico, ya que, aún si en la torre central no hay nadie, el detenido teme ser visto haciendo algo incorrecto, el temor en el sujeto está presente en todo momento porque no sabe en qué momento es vigilado. Asimismo, cualquier persona puede ocupar el rol de supervisor o vigilante: El director mismo, su mujer, sus hijos, sus amigos, los visitantes, etc. Bentham desarrolló el panóptico de tal forma que cualquier persona está preparada para vigilar u observar todo lo que pasa en ella ya que el poder no es exclusivo de nadie, no tiene la forma de un cuerpo físico. El poder es como una cadena continua, no se detiene solamente en el vigilante, también es vigilado por otra persona y así sucesivamente.
En resumen, la vigilancia jerarquizada mediante la figura del panóptico, funciona como un dispositivo disciplinario, donde se produce un poder que va hacia los individuos en forma permanente, sin dejar ningún lugar sin control. En el siguiente apartado veremos como un esquema aplicable en la sociedad que produce disciplina también se usa para obtener un saber acerca de los propios individuos.

El panoptismo y su utilización como dispositivo disciplinario en la sociedad. 

El panóptico de Jeremy Bentham posibilita ver todo lo que ocurre en las celdas del anillo en todo momento, produciendo una individualización sobre cada una de las personas encerradas. Este dispositivo puede funcionar solo o también la figura del vigilante puede recaer en otras personas, no solo el director, y esta vigilancia está contenida dentro de otro sistema de vigilancia siendo el supervisor vigilado.
Foucault reconoce (en Vigilar y Castigar (1975), tercera parte: el panoptismo) que “El panóptico es una máquina de disociar la pareja ver-ser visto: en el anillo periférico, se es totalmente visto, sin ver jamás; en la torre central se ve todo, sin ser jamás visto”, produce un poder jerárquico, anónimo, despersonalizado porque cualquiera puede operar allí. Además para Vivien Burr, tomando los conceptos de Michel Foucault, dice que: “la práctica de la vigilancia era internalizada por aquellos que eran observados, (…), que pasaron así a monitorear y controlar su propio comportamiento de acuerdo a los estándares de normalidad establecidos, (…), lo que hoy llamaremos auto-disciplina” . Lo que se logra con el panoptismo es la construcción de un poder que individualiza y también un saber sobre las personas, se registra cada acto que realizan cada uno de los encerrados, como se van comportando mientras están solos en la celda; citando a Foucault podemos decir que: “El panóptico es entonces, (…), un aparato de individualización y conocimiento a la vez; un aparato de saber y poder a la vez, que individualiza por un lado y, al individualizar, conoce”. Para Foucault el modelo del panóptico utilizado en diversas instituciones produce cambios en la conducta: Dentro de una prisión no habrá complicidad o malas influencias, en un hospital no habrá contagios, en las escuelas se acabarán las copias entre alumnos y el ruido, en las fábricas o talleres no habrá peleas entre obreros, robos, huelgas, distracciones y en los asilos no se manifestarán signos de irritación colectiva.
Este logro es el más importante del panoptismo, inserto en la sociedad como un dispositivo disciplinario genera una sociedad disciplinaria, una sola persona en el rol de vigilante controla a todo el mundo mediante la luz y la observación.
Foucault remarca que esta máquina de control social permite “encauzar o reeducar la conducta de los individuos”, de ahí que para Bentham su aplicación en los talleres, escuelas, hospitales, asilos, prisiones y en la policía da como resultado el refuerzo del poder en estas instituciones.
Utilizando este dispositivo disciplinario para realizar experiencias sobre las instituciones sociales, se vería que forma de implementar la disciplina es la más eficaz, dependiendo del establecimiento; cuál de los métodos o técnicas de enseñanza serían más útiles para que, por ejemplo, un chico o un obrero aprenda a realizar una tarea determinada. Se logra lo que Foucault llama: “el poder ejercido sobre el hombre en cuanto fuerza de trabajo y el saber sobre el hombre en cuanto a individuo”.
Para concluir, digo, parafraseando a Foucault, que el panóptico es un modelo que genera relaciones de poder sobre los hombres. Bentham lo pensó para instituciones cerradas, una herramienta que se podía adaptar a cualquier institución, el panoptismo es un esquema que forma disciplinas dentro de la sociedad. Durante los siglos XVII, XVIII y principios del siglo XIX se expandieron los dispositivos de disciplina en escuelas, hospitales, ejércitos, talleres, fábricas y prisiones logrando una vigilancia en todos los lugares en forma permanente. La burguesía imperaba a través de mecanismos jurídico-políticos con gobiernos representativos y parlamentarios, pero se vivía dentro de un panoptismo que reforzaba y distribuía el poder formando un saber, constituyendo un individuo disciplinado útil para la sociedad disciplinaria.

Comentarios finales:

El modelo del panóptico de Jeremy Bentham, para algunos autores, quedó en el tiempo como una utopía de fines del siglo XVIII, pero notablemente para Michel Foucault, en el texto El Poder psiquiátrico, no está de acuerdo con esta premisa ya que lo considera una figura importante y formal de los dispositivos disciplinarios. En este texto he tomado un aspecto del poder disciplinario: la vigilancia jerárquica en la sociedad usando el panóptico, esquema central, que genera como resultado una sociedad disciplinaria.
Teniendo en cuenta este panoptismo que surge en la sociedad industrial occidental digo que el saber genera poder y recíprocamente el poder crea el saber en un ciclo continuamente reiterado, el poder constituye la subjetividad. El poder, desde Michel Foucault, es una relación presente en todos los ámbitos de lo social, el poder construye, constituye al sujeto. El poder produce sujetos y situaciones en una relación de fuerzas, en un enfrentamiento de resistencias. Todos los conocimientos están impregnados en el juego del poder, relación que se presenta ligado a la libertad de los sujetos, incluso la libertad de disentir y oponerse. Sin duda no abarcamos todos los instrumentos que nos proporciona el poder disciplinario (la sanción normalizadora y el examen), mostrando la utilización de la disciplina como poder que objetiva y singulariza a los individuos; y también mediante el conocimiento, el saber.

Bibliografía primaria:

-FOUCAULT, Michel, El Poder psiquiátrico, curso 1973-1974, Clase del 21 de noviembre de 1973 y Clase del 28 de noviembre de 1973,1ª.Edición, Buenos Aires, FCE, 2005.
-FOUCAULT, Michel, Vigilar y Castigar (1975), tercera parte: “Los medios del buen encauzamiento” y “El panoptismo”,1ª. Edición, México, Siglo XXI, 1976.

Bibliografía secundaria:

-BURR, Vivien: Una introducción al construccionismo social (Título del original inglés: An introduction to social constructionism),1ª. Edición, Reino Unido, Routledge, 1999. Capítulo 4: ¿Qué significa tener poder?, traducción: Lic. Alejandro Bianchi, Publicación del CEP, Facultad de Psicología, UBA, 2004.
-CASTRO, Edgardo: El vocabulario de Michel Foucault, 1ª Edición, Buenos Aires, Bernal, Universidad Nacional de Quilmes, 2004.